miércoles, 24 de octubre de 2012
Kids
Es posible que no sea un caso especial, recuerdo cuando era pequeño y le decia a mi madre que yo era diferente al resto de los niños, y de las personas en general, que no sabia muy bien que era, pero que lo notaba dentro de mi. Tal vez fuese la inocencia de ser un niño, de ver el mundo bajo los ojos de la ternura, y amor que nos transmiten cuando somos pequeños, y no entender muy bien como los adultos carecian de los medios para ser felices. ¡Son adultos! ¡Pueden hacer lo que quieran! pensaba.
Es hora de crecer, pero sin renunciar a eso que no sabemos muy bien que es, que nos hace especiales.
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